Todos los mandos directivos en una empresa tienen clara la importancia radical de la Planificación Estratégica: se debe tener una idea definida de a dónde queremos ir y cómo, pues de ello depende la supervivencia y el desarrollo de nuestro negocio. Y más si cabe en estos tiempos donde el cambio y la velocidad requieren estar en permanente evolución y adaptación. La Estrategia nos marca el rumbo, es la brújula que debe guiar los pasos a dar. Si nos centramos en el desarrollo de productos y servicios IT en el sector turismo, ese dinamismo y evolución todavía es más patente.

El núcleo de cualquier estrategia de compañía empieza, desde luego, por su Dirección General: ésta establece (con mucho esfuerzo y análisis) una estrategia a medio y largo plazo, que para materializarse necesita de una serie de pasos para ir alcanzándola, es decir, una serie de proyectos. En efecto, con la dirección marcada, la Estrategia ha de ser implementada a efectos prácticos, llevada a la realidad. Es en este punto donde los Proyectos y la gestión de los mismos adquieren una relevancia fundamental: la Estrategia se implementa mediante conjuntos de acciones que son, en esencia, Proyectos.

Sabemos que las características elementales de un proyecto son:

  • Está acotado en el tiempo y, por tanto, tiene principio y fin.
  • El resultado es un producto o servicio único

¿Tenemos realmente el timón de nuestra organización, es decir, son los proyectos actuales los mejores para dirigirnos en el camino correcto?. Según el “PMI’s Pulse of the Profession®: The High Cost of Low Performance”, del Project Management Institute, sólo un 42 por ciento de las organizaciones reportan un alto alineamiento entre estrategia y proyectos en curso. Para ayudar a cerrar el “gap” entre la visión estratégica de empresa, y la implementación “en las trincheras”, muchas organizaciones están optando por implantar una correcta metodología de Gestión por Proyectos.

Está claro que atravesamos una época donde los cambios se producen a velocidad vertiginosa.

Así, los Proyectos se configuran como una magnífica herramienta por su versatilidad, ya que adopta pequeños y grandes tamaños, fija límites temporales claros y permite sacar el máximo provecho a unos recursos escasos. Es una solución escalable, evolutiva y que se alinea con el negocio.

No debemos olvidar que la necesidad de ejecutar Proyectos responde, en último término, a una decisión de carácter estratégico que, en cascada, acaba definiendo proyectos a desarrollar. Pueden darse numerosos motivos que deriven en la necesidad de un Proyecto, y en el caso del sector IT en turismo podemos destacar:

  • Una demanda de mercado cada vez más exigente, con necesidades cambiantes en cuanto a funcionalidades, conexiones, fiabilidad, etc.
  • Oportunidades estratégicas para estar constantemente innovando.
  • Aparición de nuevos requisitos legales.
  • Petición concreta de un cliente: hay que trabajar con soluciones “a medida” y distintas según cada cuenta importante.
  • Nuevas tecnologías que permiten hacer más y mejor, pero que requieren actualizar nuestros productos.
  • Optimización de procesos.

Así que, sin duda, deberíamos pensar en los Proyectos y la Gestión de los mismos (Project Management) como la manera más eficiente de implantar una Estrategia Empresarial, y adaptarse a los cambios permanentes que alrededor de ésta ocurren.

Es importante, y eso es lo que se pone en práctica en empresas como Hitt Group y sus marcas Dingus y Etoolinnovation, reflexionar sobre el hecho de que cada organización es única y necesita enfocar los proyectos de forma diferente debido a sus procesos internos; y los diferentes proyectos requerirán que la metodología sea escalable, adaptada a cada tipo de proyecto, de forma que el trabajo de gestión suponga una mejora sustancial en resultados. La base para establecer una buena metodología es que sea práctica, alejada de la burocracia, pero que nos aporte indicadores fiables y claros sobre el estado de los proyectos, y su alineamiento con los objetivos estratégicos. Pretendemos aumentar la probabilidad de cumplimiento de tiempo y coste de los proyectos, y toda metodología de Project Management debe contemplar la posible personalización para cada tipo de proyecto.

 Marc Bara

 

   Marc Bara

   Consultor y Docente en Project Management.

   PMO Hitt Group.